Pocas películas relacionadas con el periodismo o la
publicidad han alcanzado el éxito, pero las pocas que lo han hecho ha sido por
méritos propios. George Clooney dirige esta película con mano firme,
consiguiendo que “Buenas noches, y buena suerte” sea uno de esos pocos filmes
periodísticos que ha alcanzado el éxito.
Ambientada en los años 50 en los Estados Unidos, durante la
Guerra Fría y el comienzo del periodismo televisivo, la película
narra lo siguiente: esta historia real se centra en la disputa que mantuvieron
Edward R. Murrow, presentador de la CBS, y el senador McCarthy, abanderado de
la cruzada contra el comunismo.
Puede que la trama no sea excesivamente atractiva, pero les
aseguro que merece la pena. El ritmo puede parecer un poco lento, pero eso es
lo de menos (a mí no se me hizo lenta en ningún momento). El blanco y negro da
un aire sofisticado y aporta más seriedad a la cinta, que te traslada a
aquellos años 50. Esto tiene bastante mérito teniendo en cuenta que la película
está grabada en interiores, y en ningún momento en exteriores. Por lo tanto,
primeros puntos a favor: la ambientación y el blanco y negro.
El guión es bastante bueno. Consigue hacernos ver como
funcionaba el mundo de la televisión en aquella época, y además narra la
historia de forma más que aceptable. Buen trabajo en este apartado de George
Clooney y Grant Heslov. Tercer punto a favor.
La dirección de Clooney es uno de los puntos fuertes de la
cinta. Todo está bajo control. En una película de interiores es muy sencillo
que todo se haga monótono y repetitivo, pero esto no es así en “Buenas noches,
y buena suerte”. El detallismo también es algo a tener en cuenta en la cinta.
Todo está colocado de una forma concreta por algo, no falta ni sobra nada,
parece verdaderamente que estamos en las oficinas de la CBS. Cuarto.
Respecto a las interpretaciones, primero hay que decir que
el reparto es bastante bueno, destacando los siguientes intérpretes: George Clooney, David
Strathairn, Jeff Daniels, Robert Downey Jr. y Patricia Clarkson. Sin embargo, a
pesar de la calidad del elenco, son los dos primeros los que destacan y llevan
el peso de la cinta sobre sus hombros. George Clooney ofrece una interpretación
muy seria, con un papel muy trabajado. Mr. Nespresso está a un gran nivel en
esta cinta. A pesar del buen trabajo de Clooney, Strathairn destaca por encima
de todos, brillando continuamente cada vez que aparece en pantalla. Su retrato
de Edward R. Murrow está muy conseguido, y por este trabajo consiguió ser
nominado al Oscar como Mejor Actor. Cuarto punto a favor.
El mensaje que ofrece la película es lo que le da toda la
fuerza, y éste puesto en la boca de Strathairn es imparable. La escena final
con el discurso de Murrow es memorable, no porque sea una escena de calidad
estratosférica, sino por lo que transmite y por cómo invita a la reflexión y a
darnos cuenta de que la mayoría de los programas que hay en la televisión son
absurdos y no sirven para nada. Quinto aspecto positivo.
En resumen, por todo esto y por más, esta es una película
que no se resigna simplemente a ser exitosa, ganar premios u obtener
beneficios, sino que tiene como objetivo principal concienciar, y como dice
Murrow al final, enseñar. Un gran filme que forma parte de ese selecto club de
películas periodísticas exitosas y reconocidas por la crítica, y no me extraña.
Muy recomendable.
Buenas noches, y buena suerte.
Puntuación: 8/10
Aquí les dejo el trailer en español.