Antes de comenzar con la crítica de esta película, me
gustaría pedir disculpas por el amplio desfase temporal que ha habido en el
blog en los últimos meses entre publicación y publicación, pero los exámenes y
otras circunstancias personales me han impedido colgar críticas de forma más
continuada. La verdad es que tampoco he visto muchas películas en este tiempo,
no he tenido nada de tiempo…
Comenzamos… Siempre resulta satisfactorio ir al cine, y más
cuando vas bien acompañado. Yo no iba desde enero, cuando fui a ver la última
entrega de la saga “Star Wars”, y no habría podido imaginar que la próxima vez
que iría sería para ver una comedia (¿romántica?) española. No es que tenga
nada contra el cine español, al contrario, pero digamos que la comedia no es
precisamente mi género favorito. No obstante, “Nuestros Amantes” me sorprendió
gratamente. Es cierto que no es una película de gran calidad, pero consiguió
que me introdujese en la trama desde el principio.
El argumento es el siguiente: Carlos es un escritor de
guiones de cine de unos 40 años, frustrado profesionalmente. Irene tiene 30
años y no tiene claro qué hacer con su vida. Sobre ellos aún planean las
sombras de sus antiguas relaciones: María y Jorge. Cuando Irene se encuentra
con Carlos en una librería-café, sin conocerle de nada, se acerca a él y le
propone un juego: convertir sus vidas anodinas en una aventura. Irene es una
soñadora nata. Carlos ha olvidado cómo soñar. Juntos harán lo imposible por
lograr ser felices. Sólo hay una norma: no enamorarse.
Vale, sí, típica película de chico conoce chica, se enamoran
y viven felices y comen perdices. Pero no es tan simple. Es cierto que la
película cae en los convencionalismos del género en numerosas ocasiones, pero
introduce un elemento diferenciador que hace que este filme sea en cierto modo
común pero diferente: diálogos inteligentes y dinámicos con diversas referencias culturales
y literarias que dan un toque de inteligencia e intelectualismo a la cinta, y que
aportan incluso cohesión a la historia. Truman Capote y Charles Bukowski son
nombrados constantemente, ya que Carlos está escribiendo una obra de teatro
sobre ambos autores. Mención aparte merece la escena en la que Carlos se “mete”
en la piel de Bukowski para intentar expresar lo que siente a Irene.
En el apartado interpretativo, Michelle Jenner me enganchó
desde el principio. Aporta algo especial con su interpretación, y su sonrisa
puede llegar a hipnotizar. Eduardo Noriega no me convencía en un principio,
pero conforme avanzaba la película, me fue gustando más y más, hasta que
consiguió convencerme. Amaia Salamanca, limitada por su papel secundario,
tampoco lo hace mal. Fele Martínez me ha sorprendido sobremanera. Es, sin lugar a dudas, el revulsivo de la película. Te
enganchas a la locura de su personaje.
La fotografía también me ha gustado. Los planos de los
parques de Teruel me sorprendieron para bien, y en general este apartado del
filme no está mal. Planos aceptables en general. El guión, a pesar de caer en los convencionalismos del
género, tampoco está mal, ya que como he dicho antes, las referencias
literarias y culturales consiguen salvarlo y hacer que salga más o menos
airoso, a pesar de que en ocasiones pueda pecar un poco de pretencioso.
En resumen, película aceptable de Miguel Ángel
Lamata, muy recomendable para los aficionados del género y para aquellos que,
sin ser tan aficionados a este, estén dispuestos a darle una oportunidad y
disfrutar de algo un tanto diferente en el desarrollo, pero igual en el
desenlace.
Puntuación: 6,3/10
Aquí les dejo el trailer en español.
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